Tratamiento de la osteocondrosis torácica.

cómo tratar la osteocondrosis torácica

La osteocondrosis es una enfermedad crónica que se manifiesta por la degradación de la estructura tisular de las vértebras y los discos intervertebrales. Existen tres tipos de osteocondrosis, según la parte de la columna que afecte la enfermedad: lumbar, torácica y cervical.

Síntomas de osteocondrosis torácica de la columna.

La osteocondrosis torácica no se manifiesta de inmediato y en las etapas iniciales puede ser casi invisible. Por lo tanto, para no desencadenar la enfermedad, no se deben ignorar sus primeros síntomas y manifestaciones.

El síntoma principal es el dolor en el pecho durante el movimiento, la actividad física y también al mantener una posición corporal durante mucho tiempo. Puede manifestarse como un dolor agudo, repentino y severo que dificulta el movimiento y la respiración (dorsago) o como un dolor moderado que aumenta gradualmente (dorsalgia).

Los síntomas similares a la dorsalgia no siempre indican la presencia de problemas en la columna, por lo que para un diagnóstico certero es recomendable someterse a un examen completo.

Los síntomas también pueden incluir tensión en los músculos del pecho, sensación de constricción, sensación de debilidad en las extremidades y pérdida parcial o total de la sensibilidad en las extremidades.

Los síntomas también pueden manifestarse a nivel del sistema autónomo, en particular de la siguiente manera:

  • dolor de cabeza;
  • trastornos del sueño;
  • dolor en los órganos internos, que puede confundirse con manifestaciones de otras enfermedades (por ejemplo, dolor de estómago, corazón y riñones);
  • descamación local de la piel, adelgazamiento de las uñas;
  • sensación de escalofrío en brazos y piernas, escalofríos;
  • alteración de la sudoración en el lugar donde las vértebras afectadas pellizcan las fibras nerviosas.
Si ha descubierto alguno de los síntomas enumerados y necesita consultar a un médico que trata la osteocondrosis de la columna torácica o cualquier otro especialista, comuníquese con un centro médico profesional. Los médicos seleccionarán un horario conveniente para su cita y responderán cualquiera de sus preguntas.

Dado que algunos síntomas son característicos tanto de la osteocondrosis como de otras enfermedades (como úlceras de estómago, gastritis, insuficiencia renal y cardíaca, hipertensión, migraña), se recomienda someterse a una ecografía y un ECG para excluir estas patologías.

Causas de la osteocondrosis de la región torácica.

Hay bastantes razones para la aparición de la enfermedad. Más precisamente, hay una serie de factores que afectan negativamente a la salud y pueden provocar osteocondrosis. Para cada paciente, el conjunto de dichos factores puede ser diferente, por lo que para identificarlos y excluirlos se recomienda consultar a un neurólogo.

Lista de las situaciones más comunes que repercuten negativamente en la columna:

  • actividad física excesiva;
  • estilo de vida pasivo;
  • postura incorrecta y posición corporal incorrecta durante el sueño, al sentarse en una mesa, etc. ;
  • enfermedades hereditarias;
  • violación de los procesos metabólicos;
  • lesiones;
  • y una serie de otros factores.

Consecuencias del desarrollo de la osteocondrosis torácica.

La osteocondrosis torácica, además de la similitud de los síntomas con otras enfermedades, también es peligrosa porque puede provocar la aparición de muchas enfermedades diferentes debido a la compresión de los vasos sanguíneos y las terminaciones nerviosas por las vértebras dañadas.

Por tanto, la osteocondrosis de la columna torácica puede provocar enfermedades de los órganos internos (corazón, riñones, estómago, pulmones, intestinos), así como patologías del sistema respiratorio.

Diagnóstico y tratamiento de la columna torácica.

Un examen, diagnóstico y diagnóstico completos de la osteocondrosis de la región torácica solo es posible cuando se utiliza un enfoque integrado. El médico suele recurrir a métodos de diagnóstico como:

  • interrogatorio oral del paciente para identificar síntomas y factores negativos que afectan al organismo;
  • examen y palpación de la columna;
  • comprobar los reflejos, la sensibilidad cutánea y muscular;
  • radiografía para determinar la localización de la enfermedad;
  • tomografía computarizada (TC) para determinar si hay lesiones de la médula espinal;
  • Imágenes por resonancia magnética (MRI), que pueden evaluar todos los tejidos y vasos alrededor de la columna.
Si no estás seguro de a qué médico debes acudir ante tus síntomas, acude a una clínica especializada para pedir cita, donde te indicarán qué especialista te ayudará a solucionar el problema.

Para tratar problemas de columna en un centro médico, también es posible utilizar un enfoque integrado. La combinación de varios métodos de tratamiento y procedimientos de rehabilitación modernos permite eliminar las manifestaciones de la enfermedad y reducir el riesgo de recaída debido a la salud general del cuerpo.

Algunos métodos que han demostrado su eficacia en el tratamiento de problemas de columna:

  • fisioterapia;
  • osteopatía;
  • terapia manual;
  • psicoterapia;
  • terapia de drogas.

Tenga en cuenta que sólo un médico puede prescribir un tratamiento competente y eficaz. Si tiene dudas sobre qué pruebas o procedimientos necesita, comuníquese con especialistas para obtener asesoramiento.